La voz del silencio

Soñé que era poeta, y de mi mano fluyeron miles de letras, formando los más bellos versos, y todo parecía vida de ensueños. Soñé que le escribí al amor y que el amor me inspiró entre risas y lágrimas de alegría. Soñé que fui feliz, escribiendo a las flores, a la tristeza, a la vida...a las ilusiones. Y fue mi sueño tan largo que en él viví dos tiempos en ciclos de vida, fue tan claro que hoy cuando despierto lo siento corto y mi vista se encandila. En dicho sueño tuve alas, a veces tan fuertes como las de un ángel, a veces tan frágil como las de una libélula; cuando heridas fueron mis alas, hice escaleras para llegar al cielo, vi los cielos abiertos...por cierto! Y una luz de intenso amor me abrazó, y mientras estuve allí, nunca tuve miedo. La ternura de un corazón que está labrado en oro cobijó por completo mi sentir, y es el sueño más real que he tenido. Soñé que fui poeta, y cada verso volaba junto al viento, convertidos en saetas de amor, flechaban corazones, sanando el sufrimien

Como el titanic, así de fuerte me sentí con tu amor, te dije: ámame sin límites, que así te amaré yo. Y así te amo. Como el titanic, así siento el naufragio hoy en mi corazón, aquel que glorioso cantaba de la dicha, por tenerte, hoy en el iceberg te conviertes, derrumbas cada pedacito de ilusión, y aquí me encuentro, aterida entre las sombras de tu indiferencia. Como en el titanic, la más hermosa historia de amor,  la magia se hizo real  en mi vida. Más hoy, como el titanic, en la soledad me encuentro hundida.

Si fuera pintor Mi lienzo sería la estela de tu bello ser, mis pinceles sabrían perfectamente, tu rostro dibujar, tus ojos como canicas, mundos gemelos, rodeado de  bosques, bordados en terciopelo, de angel, tu cuerpo entero, tus alas con lo extenso del azul cielo, tu boca como la rosa y lirios serían tus dedos. Si fuera pintor, con la brisa difuminaría tu color, el arcoiris lo dibujaría en tu cuello, y la túnica, que adorne tu cuerpo, sería el manto que lleva el color del sol. Si fuera pintor, así quedarías mi obra de arte, porque sencillamente, así te miro yo.

Quise llegar al cielo a través de una escala en blanco, donde cada agudo eran solo notas de amor para ti. Lo grave de mi existencia, es que tarde llegué hasta ti, hoy que mis dedos recorren cada sonido de tu sentir, hay blancas que no se leer en esta melodía. A veces me suena conocido un espacio entre tiempos, suspiros que dan fuerzas para continuar, arrancando ésta intro desde cero. ¿Cómo impregnar el compás de mi latir, muy dentro de ti? Y sepas que eres todo para mi, y esa melodía escrita en el pentagrama que nunca supe leer, hoy la entiendo perfectamente en ti. Te encuentras en clave sol, con un claro sonido ascendente, donde tus bemoles apasiguan mi corazón. y aquella corchea representa cada beso, que mi piel en mis momentos de tristeza de tu boca desea, entre mil y tantas semifusas que me abrazan, cuando ya mis ojos pierden la esperanza, y simplemente eres esa figura musical...una tras otra que me da día a día la mejor melodía. Nancy©

Tu mirada me agrada , pero si me tocas, me apagas. Soy tan pequeña, mi Padre me puso en medio de tí, como  candelero. Cada vez que danzo, el brillo es intenso, de mí se desprenden colores alegres y son algo tenues cuando descanso. Rojo vivo, luz del sol, cuando fuerte soy. Entre azules busco mi paz, cuando más débil estoy, no dejando de lado los amores que me inflaman; cielos, luceros, soles y flores que iluminan y llenan la esencia con la que se levantan mis ganas día y noche, haciéndoles uno, haciéndoles sólo mañanas. Soy la que guía pasos, a veces soy ojos, la oscuridad me teme, huye de mí cuando irrumpo o me acerco. El llanto en risa se vuelve, cuando el miedo en mi compañía se disuelve. Un escudo de fino cristal me proteje, yo amo al viento, sus abrazos... sus besos son mi debilidad, pero un solo roce con él, será para mí, herida mortal. Yo, aunque fuese por un momento, en esta infinitud, de lo finito, por un instante le quisiera alcanzar.

Involuto dolor encendido, ardiendo en lo más profundo, callado y escondido. En la mente llena de tristezas, sólo una pregunta golpea con fuerzas. El porqué se levanta en mi contra, la mano disfrazada con guantes de seda, pero hiriente como esquirlosa piedra. Detrás de su amable sonrisa, se esconde la escoria, y la negritud que mancha  almas, envidia que invade como eterna tempestad sin calma. Más Tú mi amigo, abogado que me defiendes, tus ojos pueden mirar mi anguastia, pueden mirar mi espíritu que a ti acude sin dudas, tu puedes leer mis pensamientos y conoces cada impulso que mueve mi corazón, me has mirado con tu eterno amor, sanando cada herida, me das el don del perdón, y a ti clamo: ¡Ten piedad y mira con misericordia a quien mi vida con mal quiere arrebatar! Sea puesta en tí, mi confianza, y reine tu paz en mí, sobre toda fuerza destructiva, de tan vil y despiadada potestad.

Ayer te vi, cruzando los caminos de la primavera, eran tus ojos fuego sol, alma blanca y bella, alma que mi alma espera. Hoy estás aquí, llenando cada espacio, vacíos que nada en mi llenaban, más tú con tus amores, has venido a redimir, las razones dentro de mi, los deseos de volver a vivir. Te veo aquí, muy dentro de mi te has clavado, lejos muy lejos, pero en mi corazón, a ti te he guardado, en mis oídos tu voz he grabado, en mis ojos tu luz  resplandece, y tu amor, de tristezas me ha levantado.

En la belleza de un nuevo día te reflejas en mi vida. La voz que canta, me llega, me quebranta. La dulce melodía me transporta a un misterioso  mundo, dándole alas a mi corazón, para llegar a esa fracción de cielo. Un par de míticos lagos se crecen, se debordan sus aguas y emergen de allí, dos  estrellas titilantes, que quisieran ser el deleite de tus dos luceros, y que ellos, me conduzcan a dulces senderos, para descubrir el intenso sabor a vida. Dame tus manos, abraza mi sentir por ti. No dejes que me ahogue en el eterno silencio, permite que tus mudas palabras, allanen el dolor de mi corazón, y surjan fuerzas en mí, para tomar del  apasionante elixir de los vientos, y así, nazcan tiernas brisas, que acaricien junto a mi alma lo íntimo de tus pensamientos, llevándote a cada mañana, aromas de flores, y de mi vida el amor, que invade mi corazón, en su humilde sentimiento.

Que tristeza jamás llegue a ti, por mí. Porque quiero estar, en tus manos entregar, día a día la dicha, en tu corazón, alegría. Que dar mi vida sea la prioridad, no es necesario morir, un segundo que piense en ti, es un segundo de mi vida que te doy, así, voy quedando en tu camino, como madeja desenredada, en su rastro, hilos de amor. Que tus ojos y manos, gocen de la invisible presencia, a través de Amor más grande. Quiero ser tu compañía, en tus momentos de soledad, justo allí, me podrás encontrar. El aliento que te falte, tómalo de mí, puedes abrazarte de mi mirada, y yo te esconderé dentro de mi fuerza, y mi amor por ti, siempre, será tu espada.

Se abre el cielo arrojando su canto de luz en lluvia, relámpagos de fuego, traspasan la tierra, ardiendo las llamas de un amor, voz en trueno grita... que lento se extingue. se suaviza la furia, del dolor, inhibiendo las ganas de habitar, ese mundo que lo era todo. Molido el cuerpo, sacrificio, en alabanza de labios, mueva al corazón en sentir el deseo de amar primero, al primero, abandonando en sus manos, al de los más preciados, sin conocer sus más altos pensamientos, pero confiando sin reparos, que su proceder está lleno de justicia, y su obra, la bondad que nace de amor benigno. Jamás atormente la duda la mente, y que mis ojos contemplen el galardón, el deseo de mi alma, largos días sobre días, a quien amó mi corazón.

Todo me parece tan gris que ya no hallo colores en las flores, mi pecho duele, duele fuerte, y mi alma se hunde nuevamente, en los confines de su mente, las melodías de los cantos, turpiales a orillas de manantial suenan en voz quebrada, las notas fuera de su pentagrama, la tristeza de mi alma exclaman, Duele fuerte mi pecho, y se contiene mi respiración, nublados mis ojos, todo parece confuso me encuentro perdida dando pasos imciertos en medio de mi oscuridad.

Silentes y tenebrosas las sombras, visajeaban en lo oscuro de los techos de la vieja choza, donde acogía en su interior, a su amada. Acechaban a los sueños del guardián, penetrando su inconciente, haciéndole relinchar como bestia en bruscos saltos de resabio, mientras los iluminados ojos, que ven a través del velo impenetrable de la negra noche, extendía desde su mente las poderosas palabras invocando a su amo, y ángeles bajaban a su encuentro y eran sus alas refugios inconmovibles, brazos acogedores de quienes sufren  persecución, llámese tristeza o decepción, amargura o desilusión, angustia....tribulación. La omnipotencia tomaba forma cubriendo los aires formando bayas de acero invisible  y todo...todo por defender a su amada. El Defensor. Nancy J. Hernandez© 

Sentí morir al naufragar en el mar de tus ojos, mi corazón pedía auxilio, al hundirse cada vez más en tu mirar, y suplicaba mi alma por no pecar, en mis pensamientos mis resbaladizos labios siempre caían en los tuyos, mientras en mi suspiro te respiraba sólo a ti, los días pasaban y en ese naufragio mi tortura aumentaba, el sol de tus inocentes abrazos ensendían lo escondido de mis sentimientos, y mi culpabilidad me arrastraba a lo lejos en su gran marea. Sentí morir de tristezas al ser consiente de no poder tocarte, mientras mis manos levitaban acariciando tu rostro a través de la  imaginación, y corrían mis dedos sobre tu piel, en lenta velocidad hacia lo prohibido, agonizaba en las olas de tu voz y este corazón a punto de gritar, arrojaba con fuerza cada latido, haciendo ecos desconosidos, despertando sentimientos que siempre  se mantuvieron dormidos. Sentí morir al descubrir  que puedo sentir  y amar en la inmensidad, que jamás, sentí

Te diré amor, aunque oscuros sean tus ojos, no necesito ver su color para mirar más allá, en su espléndida claridad. Te diré amor, que los cielos son más hermosos, cuando cierro los ojos, me invade tu recuerdo y son tus manos las más suaves, tomadas de las mías, me llenas el pensamiento con tu bella sonrisa, inocente sonrisa divina. Te diré amor, que tu canto es susurro al viento, que acariciando mis oídos, apaciguan mi furia y mi llanto, por no estar contigo. Y es la primavera , el perfume de tu piel morena, y es el agua del río, la pasión que corre por tus venas, vivir incesante, en turbuletas ganas , volcando los sentidos, aguas que se convierten, en bravas llamas, rebotando burbujas de ilusiones, en un bello despertar. Te diré amor, que eres el motivo, que convence a mi corazón, de probar de la felicidad, en derroches de alegría, junto a los pasos de tu andar. Siempre a ti. ©Todos los derechos reservados© Nancy J. Herna

Has guiado mis pies a gozo, baile de paso lento, sigue las sonrisas, que nacen después del llanto. Luz infinita que discipa lo borroso de mi cristal, permitiéndome ver lo hermoso y claro de tu amor, entre el murmullo del silencio afinas mis oídos a tu dulce voz, que arruya entre finas melodías de alegría. Y el tono de nuestra canción se sincroniza en nuestro corazón, siguiendo el ritmo del maravilloso sonido de la vida misma, entre rosas de perfumados pétalos, deslizadas en aguaceros, que muestran los cielos claros. Ahora se escucha una nueva canción, en pacífico abrazo, luz que guía mi corazón, corazón que guía manos, mis  manos guían tus pasos y tus pasos guían mis pies. Bailamos al son de un nuevo día. El ritmo de la vida, se torna color alegría, y mi sueños te miran, en ternura desmedida, mientras va amaneciendo, rayo de luz que nos ilumina, una nueva oportunidad, para guiar los ojos, de aquellos que en oscuridad apenas caminan.

Inhalo recuerdos que lentamente  se pierden en el aire de olvido,  exhalo la angustia que fue amarte con locura, relajada mi respiración ya no te encuentra, parece absurdo el sentimiento que hasta ayer  le fue amargura, acorazado el espíritu sigue con un corazón, dispuesto a lograr su cometido, un cuchillo en la garganta que detenga el  dolor  que atraganta, certero pensamiento, libre la memoria, cuerpo sin deseos de ti. amores desterrados por propósitos divinos, pluma en el aire, velero sin vientos, un eco sereno, calma que me llena al sentir la mirada que en ternura se despliega. Hondo mi suspiro, pregóna que he ganado, sobriedad en plenitud, cuando navego en  tormentas en tenebrosa alta mar. Y s in cruzar la línea de lo obstinado... r azones en demencia,  insistir a lo  descoordinado, agujas de reloj, que no logran explicarlo. Inhalo olvido, exhalo resignación, en el viento mi suspiro que te recuerde la intensidad de mi amor.

Me he mostrado a ti  con toda sinceridad, pero hoy verás mi corazón, como a través de un cristal, pues no soy el ángel que muchas veces parece, no soy el ángel, de perfección, en su pensar. Y todo sucede cuando  tus ojos, puedo   contemplar, mirar tu cara, tu boca, labios de flor, suaves pétalos, que ansían los míos en besar. Se queda mi alma sin oxígeno. V erte genera vuelcos en mi ser, y me atrapa el deseo... besarte una vez...sólo una vez... que mis besos tu desees.                    ... M e contengo. Sabes tú, que sólo deseo tu bien, aunque no sea el ángel que obedece fiel, a cambio entrego todo mi sentir, mis deseos,  sueños y  placer, s ólo para que mi voz se escuche en el cielo, sin tener que esconder que te quiero, presentar mi sentir, puro y sincero, por ti, que eres mi lucero. No soy el ángel que obedece fiel, muchas veces he deseado tu piel, tu, mi más grande tentación, pero a cambio de tu bien, mi deseo, lo llevo cautivo, siem

Tu no sabes,  no sabes lo intenso que es el tornado  que se forma en mi pecho,  al pensar en ti.  La revolución de mi corazón,  llega a mil. El aire no alcanza  y la respiración pierde la calma. Tu no sabes,  no sabes cuánto haría por ti,  y no crees,  que el único y verdadero amor, lo he sentido por ti. Lo cierto es,  que jamás lo podré admitir, y si te hablo, te diré que no es nada, en silencio te aprendí a amar,  a sentirte sin preguntar,  la respuesta a mi inquietud,  sé que sería mortal. Tu no lo sabes,  no sabes que anhelo cada día  tu voz escuchar, que espero,  tu canto con frases de amor, aunque no sean para mi... me conformo con soñar. No sabes que beso tus ojos, que lágrimas brotan los míos, cuando siento que no estás, que mis manos tiemblan, que mis brazos sufren, al intentar el viento abrazar, y saber yo... comprender que son cosas,  que tu...que tu, nunca, por mi sentirás, mi alma pierde aliento, y sus alas, empapadas de frío, no

Quién pudiera realizar, la más sublime composición, poesía es la expresión, que diera alas a tu ser, que quemara de pasión tu piel, y tu corazón me diera un solo, como el guitarrista en ejecución, y fuera mío, el vibrato de tu voz. Quién pudiera regalar, la serenata del ruiseñor, que mi canto, llegara a tu corazón. Cuáles manos tocarían, las sedas de tu alma, que de mi te hablaran, que mi amor te entregaran. Pero cada impulso es fallido, ni en canción ni en poesías, logro mover de ti, lo que mi alma ansía. Quién fuera yo, para tenerte conmigo, abrazarte noche y día, pero sólo una cuerda nos une, esas letras que trenzo, hacia ti, son mi única vía. Quién pudiera leer tu pensamiento, y saber si por un segundo, tu me piensas, saber...si por un segundo me has querido hacer tuya. Quién soy yo, para decirte que te amo, más que un átomo en el mundo, invisible a tus sentimientos, mientras muero por tenerte.

Cuanto tiempo ha pasado, y no he vuelto a ser igual, es poco y me parece una eternidad, un recuerdo inevitable, del que no puedo escapar, me asalta en las noches, me asalta al despertar. Me estremece la tristeza, saber que no volverás, me destroza el alma, vivir sin ti, vivo mi soledad. Un vacío inmenso, que nada puede llenar, desconsuelo me arruya, vivir sin ti...sin ti! se que no volverás. A unque ya no estés, m ientras los días pasen, en mi mente y corazón, aquí muy dentro, tu vivirás.

Bajo la lluvia, rocío de tu amor, v as mojando todo mi ser, agua de vida, v a saciando mi sed. Ro sas , desprenden su olor, suspiro, fresca flor, incienso es tu amor, tu presencia, grato calor. Bajo tu lluvia, baño de luz, il uminas mi universo, nadie como Tú. Bajo tu lluvia, riego de sueños, s oy libre, esclava sin dueño. M i espíritu, al infinito elevas, s oy viento, libertad mis cadenas. Bajo tu lluvia, estrellas fugaces, c ada una, para tí...un te quiero, en  mi cielo, tú, mi Sol, mi lucero, q u e sea la lluvia de tu luz, la que siempre me alcance.

Un deseo incumplido, donde la voluntad se somete, a la espera de un "no vendrá". U n corazón, que se quiebra como loza fina, y a pedacitos, cortado por pellizcos, se desintegra, dejando el espacio hueco, cual refugio, fría hoguera, en desinterés y ánimo... en el puerto. Un "hasta aquí" , ya no habrá más letras. Y aquel amor proclamado, cubierto por un manto de hielo, quedará en ese espacio guardado, dormido como monstruo sedado. Un "ya me voy", a punta de labios, entre dientes, el deseo cabizbajo, en el pecho, la daga de un "no pude", de un lado al otro, atravesada.

Paloma que vas, en tu sereno vuelo, m e miras, con tus ojos tiernos, p aloma de prósperas alas, que remando van, acariciando al viento, no olvides nunca, que yo a ti te quiero. Paloma, que al viento tú abrazas, y en tu pico, hay flores de primavera, ven y canta, canta tú mi paloma, q ue escucharte, mi alma espera. Paloma, que en tus ojos me pierdo, ven a mí, que mirarte quiero, en tus negros ojos, emprenderé mi viaje, cual túnel que al final, me encontraré en su luz, en su niña, la de tus ojos paloma. No. No cortes hacia mi tu vuelo, sabes bien, cuánto a ti te espero, a cada mañana, y al transcurrir el día, en las tardes y mis noches, sabes tú, que eres mi gran anhelo. Tus ojos paloma, están llenos de fuego, avivas la llama, de un amor certero, Amor que lacera, mi vida entera, sentimiento que quema y quema, hiriente y a la vez, muy placentero.

Te siento al cerrar mis ojos, y aunque siento temor al mirarte, deseo tanto tu mirada, una sola, que mueva mis cimientes. Hoy deseo estar junto a ti, que tus brazos no me nieguen su calor, y que vuele mi espíritu, siempre más allá, que me escuches sin que tenga que hablar. Deseo tanto, que no me ahogue la sensación, de sentirte tan distante, huyendo de mi razón, la que me hace insistir, y siempre llamar tu atención. Amarte amor. Callas y se desespera mi alma, y en un momento, todo en mi es confusión, la duda mi tormento, me pregunto si es sólo ilusión. Hoy deseo tanto poderte escuchar, saber que no muero en el intento, saber... que no planto flores en el desierto, y que la lluvia de mi amor, en vano no caerá. Hoy deseo se vaya mi timidez, que me invada la seguridad, amarte sin temor, y podertelo expresar, Deseo, que tus manos sean mi suelo, tu palabra mi sustento, la que ahuyente mi desespero, la que me de paz y consuelo. Nancy© #Háblame

Y esa voz que ermergia del silencio, era el sonido de mi alma, y cada letra, cada palabra que decía, eran gotas de amor, que de mi alma destilaban, y a tu oído caían, diciéndote que te amaba pero, ¿para qué seguirte susurrando, si tus sentimientos no cambiarán? lentamente esa voz, se fue apagando, se fue uniendo, a cada insonoro decibel, echando a sus bolsillos la esperanza, que tu amor le correspondería también, Más sólo halló, lo que no quería tener, vacíos y desaciertos en su corazón, ahora, esa voz calla, destila de su dolor, pues el amor, se abrazó a la nada, rompiéndose la ilusión, como  burbujas de jabón, y mi realidad te sigue amando, como nunca antes amó. Aunque calle mi voz, y se silencien mis letras, aunque duerma mi alma, cansada de doler, mi amor tu siempre serás, aunque para ti sólo sea, una amistad más.

Puse mis ojos en ti, obediente mi corazón, les siguió. Deseé con todas mis fuerzas, robarme tus besos, tus abrazos, quise que fueran míos, sólo míos y mi amor te convenció. Tan lento...despacito, fuiste entrando, me fuiste enamorando, no fui yo quien te cautivó, fuiste tú, quien todo de mi se llevó, mi cautiverio son tus brazos, mis besos los tienes a tu antojo, y mi corazón, late a tu ritmo, todo por poner en tí, mis ojos. Q uise robarme todo de tí, y en tu prisionera,  me convertí.

Pregonando a los cuatro vientos, un beso volátil y firme a la vez, en busca de tus labios, escondidos en la imagen, celosamente, guardada en mis pensamientos. Entre tanto, u n suspiro que reclama, en infinitas ganas, confundirse con el tuyo, encendiendo llamas, que sólo  apagarían, tus agitadas manos. A los cuatro vientos clama, mi sed de ti, deseando beber, de tu oasis . Sa cia a este ser, que sólo por ti escribe, cada letra, es un grito, de ansia innegable, beber de tus besos . P ues mi beso te busca, continúamente exclama, cuando  en medio de la noche, cómplice y callada, de mi mente se escapa, y sólo reposa en mis sueños, cuando en ellos, tu boca encuentra, y plasma ndose en tus labios, dibujado queda. Y despierto ...despierto sonriente, con mi beso en ti, esperando te despiertes, pensando siempre en mi. Mientras duermo, mi beso te busca. Nancy.

Cansado de quererte, despierta hoy mi corazón, tanto tiempo durmió, soñando, ahogado en ilusión. Quiso lograr enamorarte, pero ahora, ya con el deseo gastado, de siempre cotejarte, la esperanza de tenerte, respira a pocas ganas. Cansado y mal herido, entrecortada su voz en su débil latido, aún pronuncia tu nombre, y su motivo esta vez, es echarte al olvido. Lejos de todo ese deseo, hecho fantasía, razonando su locura, quizá lo logre un día, el tiempo será su cura . ............ Má s vuelve y suena , uno...dos  golpes, pum , pum, y te encuentro, d entro , muy dentro mío, luces tan brillante, se despierta mi amor por ti, es rojo su vestido, rojo color sangre... titilan mis ojos como estrellas, me olvido de olvidarte, en este corazón, sus fuerzas se renuevan, pues sigues siendo tú, la razón de su más lindo sentir, sigues allí, cual si fueses tú, por siempre, su luz.

Cuando cesen mis palabras, y no escuches el eco de mi voz, cuando se apague la canción, y la noche apague al sol. Recuérdame. Cuando mires los jardines, las flores te hablarán, te dirán que como a ellas, siempre te miré,  su color ante ti, con el sol irradiarán, aquellas, que ya están marchitas, mi mirada te entregarán. Recuérdame. C uando escuches al turpial, una serenata te dará, cada madrugada,  en tu ventana cantará, con arruyo de tenor, tu mañana alegrará. Recuérdame. Cuando escuches la canción, que con promesa te canté, aquella que dice, que por siempre te amaré, esa, entre muchas, que con el corazón, te dediqué. Recuérdame. Con cada letra que escribí, con amor del alma,  mi puño la trazó, con alegría o tristeza, con melancolía o dolor, fue todo lo que sentí, por ti, mi corazón. Recuérdame. Como esa persona  que en silencio te amó, en medio lo ireal, lo más cierto te entrgó, su puro y cristalino amor, que ningún intento, por destruirlo,

Aún no entiendes que busco cada excusa para ver si logro olvidarte, olvidar este sentimiento que me hiere, pero me interné dentro de este amor, laberinto que me retiene, allí me paseo , con dolor, pues n o entiendes que mi amor por ti, va más allá, de un deseo, o una pasión, que te busco a cada momento, pero no te lo puedo explicar, si sólo un poquito, pudieras sentir mi sentir, pero no lo entiendes. Y busco razones, para apartarme de ti, busco otros quereres, pero no logro querer, como te quiero a ti. Hace falta que te apartes tu, un rato, un instante, para darme cuenta que sin ti no me hallo, b asta estar un día sin ti, para que se deshaga mi corazón en la angustia, y mis ojos naden en el mar de la tristeza, para que se pierda mi pensamiento en el infinito, y sienta mi alma, la eternidad, para que me ahogue el desespero y me asfixie la ansiedad. Basta con buscar motivos y excusas para no querer estar, a tu lado amor, y así entender

Entraste en mi sueño, reconfortandome en la tristeza, abrazo de madre, inundandome de fuerza. Allí, entre tu cálido abrazo, total seguridad, puro Amor, Amor puro, no quiero soltarme jamás, de ese lugar, en donde se puede estar seguro. ¿ Cuál Amor más grande, que el tuyo, ese que me has podido dar, con voz clara, sin murmullo. Amor incondicional, que de tu corazón lo instuyo? Entraste en mi sueño, mi sueño es la realidad, no fue ilusión, voy, camino hacia ti porque tu Amor, es toda mi verdad. #Sueño_Realidad.

Que mi mano escriba, con la fuerza del dolor, de la angustia y sin sabor, que me ha dejado el vaciar mis sentimientos ante ti. Que plasmado quede, este último "te amo" que es la causa de mi llanto, dejandome el alma vacía, cusandome quebrantos. Que por mis venas recorra, todo lo que siento, pero que la tinta lo recoja, y lo dibuje en el firmamento, que a través de mi mano salga el dolor en cada letra, la plasme en el papiro, describiendo mi sollozo suspiro. Que se borre de mi mente, -ahora invito al olvido- que empañe cada imagen, del desprecio que me hiciste, al abrazarte y besarte, lo que tanto me ha dolido. Que mi amor en ti quede grabado, grabate este último TE AMO, porque de mí no lo vuelveras a escuchar, aunque pasen miles de años.